¿Cuáles son los mitos más populares de la copa menstrual?

Tiempo de lectura: 3 minutos

Hemos recopilado una serie de mitos que te pueden ocasionar pánico a la copa menstrual para que veas tu menstruación con otros ojos.

¿Cuáles son los mitos más populares de la copa menstrual?

Seamos sinceras.

Cuando hemos aprendido a normalizar el uso de productos sanitarios (como las compresas y tampones) y, paralelamente, a encontrar la menstruación como algo sucio, el enfrentarnos a la copa menstrual puede llegar a ser de “O-M-G! ¿Pero qué es eso, madre mía?”

Por un lado, amigas y conocidas (incluso influencers) se encargan de hacer publicidad gratuita sobre las maravillas de la copa. Por el otro lado, posiblemente una oleada de miedo y angustia puede congelarnos y hacernos dudar sobre si pasarnos a la copa menstrual. De nuevo seamos sinceras, meternos una copa ahí sin estar acostumbradas a estar en contacto con esa parte del cuerpo… Bueno, probablemente genere un poco de pánico. En especial si no contamos con la información (con base científica) adecuada.

Por ello hemos reunido una serie de mitos que pueden ocasionar pánico a la copa menstrual y brindar una información fehaciente y congruente para ayudarte a tomar una decisión al respecto.

Mito 1: La copa menstrual se puede perder dentro de tu cuerpo

No. La vagina no es un hoyo negro que absorbe todo para desaparecerlo mágicamente. En realidad la vagina es un conjunto de músculos y fibras que no sólo tiene la función de canal de parto y menstruación, también es un espacio cuyas paredes permiten sostener la parte interna del cuerpo. De modo que si tenemos un suelo pélvico fortalecido, la copa menstrual no se perderá: se sostendrá en su sitio para recibir y acumular el sangrado menstrual.

Lo que sí es verdad es que es importante conocer la altura de tu cérvix para elegir sabiamente la talla de tu copa.

Con la Eureka! Cup, al ser la única con vaciado fácil, puedes disfrutar de un periodo menstrual sin miedo a que la copa se pierda en el interior vaginal. Esto es gracias al tubo (más largo) que permite el vaciado desde la vagina. Basta con jalar del tubo y, con cuidado, sacar la copa del interior.  

Mito 2: Puedes perder la virginidad utilizando la copa menstrual

No. El tema de la virginidad tiene un fondo sociocultural, por lo que en términos biológicos no se está perdiendo la virginidad. El himen, esta delicada capa que en el canal vaginal se mantiene realmente intacta a la hora de introducir una copa menstrual.

Mito 3: Si no vacías la copa menstrual, la sangre se te regresa al útero

No. Los músculos del útero sacan la sangre menstrual de manera activa, evitando que “regrese” por el camino por el que llegó.

No obstante, no es recomendable mantener una copa menstrual durante más de 8 horas (además que es importante irla vaciando a lo largo del día). En el caso de la Eureka! Cup, es posible mantener la copa menstrual en el interior durante varias horas (¡e incluso dormir con ella!).

Mito 4: La talla de la copa menstrual depende de tu flujo

No siempre. La talla de la copa menstrual depende de una serie de factores: desde la fortaleza del suelo pélvico hasta la altura de tu cérvix. De modo que si tu suelo pélvico no está lo suficientemente fortalecido, una talla grande y una serie de ejercicios de Keggel (+ las Pelvic Balls) harán su trabajo; si tienes tu cérvix muy bajo, una talla pequeña será bastante útil. La realidad es que para elegir la talla de la copa menstrual es importante entonces tener conocimiento del cuerpo de una.

¿Cómo elegir una copa menstrual?

Mito 5: La sangre es sucia y huele mal

No. Pues tampoco.

Es verdad, la menstruación puede a veces ensuciar la ropa pero no contiene ningún tipo de bacteria (como en la orina o los residuos fecales, ¡e incluso en nuestras manos o teléfonos celulares!). De hecho, el sangrado menstrual se encarga de mantener el cérvix en el más medio ambiente más óptimo e higiénico.

El uso de compresas y tampones, con químicos tóxicos y materiales con base en plástico desechable, es lo que convierte un proceso orgánico en un resultado: 1) oloroso, 2) contaminante y 3) con sensación de suciedad.

En realidad, la menstruación no es el problema – sino el que se le considere moral y socialmente sucio.